Tras pocos meses en el mercado, la añada 2017 de unos de los vinos más especiales de Bodega Javier Sanz Viticultor, Finca Saltamontes, se ha agotado batiendo así un récord en cuanto a rapidez de venta desde que se tienen registros en la bodega.
Finca Saltamontes 2017, con una edición limitada de 2.290 botellas, está elaborado al 100% con uvas de la variedad verdejo procedentes de cepas de más de 150 años. Concretamente, pertenecen al viñedo familiar de Pago Saltamontes que compone 2,27 hectáreas supervivientes a la filoxera con unas características de genética, suelo y clima, que conforman un paisaje único en la zona, ideales para elaborar un gran blanco de guarda. El resultado, un vino elegante, único e histórico criado sobre sus finas lías lo que le aporta una especial cremosidad y suavidad en boca. Durante 12 meses almacenado en depósito de inox y guardado en botella durante, al menos, 36 meses.
Desde la bodega ya se está trabajando en la nueva añada de 2018, que se espera que pueda ver la luz a finales de este verano.
Recuperación de variedades extintas
Pago Saltamontes, procedente de un viñedo familiar prefiloxérico, es una muestra más del trabajo realizado por el viticultor en cuanto a investigación y recuperación de variedades autóctonas y otras casi extintas. Es el caso de uvas como la “bruñal” con la que se elabora el Javier Sanz Paraje La Encina; la “cenicienta” del Colorado de la Colección V o la “Malcorta” de uno de los verdejos más singulares de la bodega.
En el momento actual Javier Sanz trabaja sobre nuevas variedades como la Castellana Blanca 2022, Prieto Picudo Blanco 2022, Verdejo Negro 2022 y Cenicienta 2021 sin barrica, que como él mismo ha explicado, “son el presente y el futuro de la bodega en su afán por crear vinos sorprendentes, de calidad y únicos”